Así lo reflejan los datos publicados por el INDEC, que son previos a la devaluación de agosto y en lo que además se reconoce un 9,3% de indigencia.
En medio de la fuerte escalada inflacionaria, el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC), dio a conocer los datos de pobreza e indigencia en la Argentina, para la primera parte del año. Los cuales mostraron un notable incremento respecto a las cifras del último semestre del año 2022.
Según el ente oficial la pobreza alcanzó al 40,1% en los primeros seis meses del 2023. Mientras que la indigencia trepó al 9,3%, en el mismo periodo. Vale aclarar aquí que los datos son previos a la fuerte devaluación del 22% que llevó adelante el Gobierno el pasado 14 de agosto, después de las PASO y que desataron una fuerte escalada de la inflación.
De hecho, la última estimación del índice de precios que mide el organismo conducido por Marco Lavagna, dio una inflación del 12,4% para agosto, elevando al cifra interanual por encima del 124%. Además, se espera que para septiembre y octubre, el dato de mantenga por encima de los dos dígitos.
En su último reporte el INDEC, detalló que la pobreza afectó a 18.632.582 personas y la indigencia a 4.321.272, según los datos oficiales proyectados para todo el país y no solo a los conglomerados urbanos medidos por las estadísticas oficiales.
Si bien este no es el número más elevado, este fue el del 42% alcanzado durante el pico de la pandemia por covid-19, la cifra se asemeja a esas épocas y demuestra un fuerte salto respecto al 36,5% en el primer semestre de 2022 y 39,2% para el segundo semestre del mismo año.
Por su parte, el nivel de indigencia fue del 8,8% en los primeros seis meses del año pasado y del 8,2% en la segunda mitad, por lo que implica una suba de más de un punto porcentual en el inicio de este año.