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Steve Carell vuelve a la comedia junto al creador de “The Office”

Después del éxito de "The Office", Steve Carell y Greg Daniels unen fuerzas para esta odisea espacial.


Después de tomarse un respiro de la comedia y demostrar sus talentos con el drama con series como “The Morning Show” y películas como “Beautiful Boy: Siempre Serás mi Hijo” (Beautiful Boy, 2018), Steve Carell vuelve a hacer equipo con el creador de la versión norteamericana de “The Office” (2005-2013), para llevar adelante una nueva sitcom original de Netflix. Greg Daniels y el mismo Carell son las mentes detrás de “Space Force”, una historia centrada en esta flamante rama de la milicia estadounidense, que guarda algunas similitudes con las extravagantes ideas del gobierno de Trump.

Mark R. Naird (Carell), teniente general de la Fuerza Aérea, es promovido a almirante de cuatro estrellas, con toda la esperanza de asumir el cargo de jefe de operaciones del departamento. En cambio, y muy a su pesar, debe tomar el liderazgo de la Fuerza Espacial, con la meta de volver a poner a un hombre sobre la Luna para el año 2024. El glamour del nuevo puesto se desvanece cuando Naird y su familia -su esposa Maggie (Lisa Kudrow) y su hija Erin (Diana Silvers)- tienen que mudarse a Wild Horse (Colorado), donde se ubica la flamante base de operaciones.

Un año después, el trabajo duro empieza a rendir sus frutos y la Space Force está a punto de lanzar el satélite Épsilon 6, un artefacto multimillonario (el costo es de seis mil millones de dólares) qué, básicamente, tiene la tarea de “interactuar” con otros satélites. El evento, supervisado por miembros del congreso (que deben seguir autorizando las montañas de dinero que gasta anualmente esta rama), pone toda la presión sobre los hombros de Naird, aunque los científicos -encabezados por el doctor Adrian Mallory (John Malkovich)- le aconsejan posponer el despegue debido a las condiciones climáticas.

Finalmente, Naird decide seguir sus instintos y años de experiencia acumulados en la milicia. El lanzamiento es todo un éxito pero, ya dentro de su órbita, el Épsilon 6 es saboteado por otro satélite chino, que desprende los paneles solares del aparato (su única fuente de energía), poniendo en riesgo toda la misión. Este es el punto de partida para una descabellada operación de rescate que implica a un perro siberiano y un chimpancé, enviados al espacio meses atrás.

 


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