Más allá del análisis del partido que Boca le ganó a River pero no le fue suficiente para clasificar a la final de la Copa Libertadores, Gustavo Alfaro dejó algunas frases dando a entender, de alguna manera, que podría dejar de ser el entrenador del Xeneize el año que viene.
«El club está en una disyuntiva política y hay elecciones de acá a fin de año. En ese sentido, cuando hace dos meses Burdisso quiso hablarme de una renovación de contrato, yo le dije que no era el momento. No correspondía. Cuando vos estás cómodo en un lugar, una charla así puede durar cinco minutos, más que eso no y era momento de abocarnos al trabajo», comenzó diciendo el técnico en su última respuesta de la conferencia de prensa.
Y sentenció: «Ahora quiero tratar de terminar con estos jugadores los partidos que nos faltan y después irme a mi casa y recuperar mi vida».
Además, Alfaro se mostró molesto por las críticas y cuestionamientos recibidos en partidos anteriores. «Me siento orgulloso de haber estado todo este tiempo en Boca, no es fácil el escarnio público y que te peguen, a veces con bajeza. Siento que aprendí mucho en este tiempo, estoy orgulloso del plantel que tengo», indicó.