El empresario de la carne fue detenido el viernes por Interpol en calidad de prófugo de la Justicia argentina, pero hasta ese momento estuvo alojado en un hotel de 4 estrellas.
Puede que Alberto Samid se haya autoproclamado «el rey de la carne» pero si hay un título que no podrá arrojarse es el de «el campeón de la escondida», ya que fue encontrado y detenido en el hotel Radisson de Belice en cuestión de horas desde que se emitiera la alerta roja de Interpol.
El empresario se refugió en un hotel 4 estrellas que cuesta $6900 la noche en el intento de pasar desapercibido. Como era de esperarse, la policía lo encontró sin complicaciones y ahora está a la espera de que la Justicia local habilite su expulsión del país.
Una búsqueda rápida en Google Maps permite encontrar alojamientos de perfil bajo en una pensión o posada por $1800 o $1300 la noche, pero ninguno de esos sitios llamó la atención de Samid a la hora de eludir a la policía.
El jefe de Gabinete del Ministerio de Seguridad, Gerardo Milman, informó este sábado que Samid se encontraba en «un hotel importante de la capital del país» y que cuando se enteró de la alerta de Interpol decidió trasladarse «en forma marítima» al Radisson ubicado en «una península dentro de isla que tiene importante costa».
Milman aclaró que Samid «estaba solo al momento de ser detenido».
Los hoteles suelen tener protocolos de seguridad, en especial los que forman parte de cadenas y tienen 4 o 5 estrellas, y eso incluye prestar atención a las alertas de Interpol sobre prófugos catalogados como «violentos», como en el caso de Samid.
Samid fue declarado prófugo el viernes pasado y cuando regrese al país deberá comparecer ante el Tribunal Oral en lo Penal Económico (TOPE) por una causa iniciada hace 23 años por presunta evasión fiscal y asociación ilícita.
Hasta que eso ocurra, el empresario de la carne puede decir que tuvo la posibilidad de pasar un rato en un hotel agradable.