El pago de un bono de $5.000 a los trabajadores del sector privado se destrabó ayer por la tarde, tras una reunión en la sede de la Secretaría de Producción. Fue el ministro del área, Dante Sica, quien avanzó en la negociación, tras reunirse con integrantes del Consejo Directivo de la CGT y varias cámaras empresarias.
«Se trata de un bono de $5.000 no remunerativo de caracter obligatorio para las empresas», anticipó Daniel Funes de Rioja, directivo de la Unión Industrial Argentina y la COPAL, quien aclaró que el texto de la norma será redactado mañana.
«Sindicatos y empresarios tendrán que ver con responsabilidad la situación de las pymes. Aspiramos a generar un marco para que pueda ser cumplido, a partir de ahí los problemas habrá que analizarlos caso por caso», aclaró el empresario.
«Ya está la decisión tomada, hubo consenso para recomponer la pérdida del poder adquisitivo en el corto plazo», sumó Jorge Sola, secretario de prensa y difusión de la CGT.
A pesar de los reparos expresados por empresarios Pymes, se logró el acuerdo y ahora resta definir aún la fecha y el modo de pago, algo que se detallará «en menos de veinticuatro horas», unas vez que esté redactada la medida.
Desde la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), aclararon tras la reunión que se trata de un «aporte obligatorio de 5 mil pesos de recomposición salarial no remunerativo, en cuotas y a cuenta de paritaria». Reclamaron además que el pago se pueda ejecutar en «al menos cinco cuotas».