La cantidad de contagiados por coronavirus en el mundo superó los 5,5 millones de casos, mientras que los muertos por esta enfermedad son más de 350 mil, según el último informe publicado por la universidad Johns Hopkins.
Con 391.222 casos confirmados y 24.512 decesos, Brasil continúa siendo la segunda nación con el mayor número de infectados en todo el mundo, solo por detrás de los Estados Unidos que acumula 1.725.275 de contagios y 100,572 fallecidos (Brasil es el quinto país con más muertos detrás de EE.UU, Reino Unido, Italia, Francia y España.
Con los 1.039 decesos producidos en la jornada de ayer, se trata de la cuarta vez que se supera el umbral de los 1000 fallecidos por Covid-19 en Brasil desde que se confirmara la primera víctima el 17 de marzo.
Al respecto, nuevamente el presidente Jair Bolsonaro ha tomado una posición contraria a las medidas de aislamiento social recomendadas para combatir el nuevo coronavirus.
En una entrevista realizada en las últimas horas, el mandatario afirmó que no es posible que la economía permanezca cerrada: “Sabemos que debemos preocuparnos por el virus, especialmente los ancianos, los que tienen enfermedades, los que son débiles, pero sin eso de cerrar la economía. 70 días la economía cerró ¿Cuánto durará?”, marcó.
La enfermedad avanza en un momento de crisis política, agudizada por la falta de articulación entre el presidente de ultraderecha Jair Bolsonaro, que considera que las cuarentenas son letales para la economía, y la mayoría de los 27 gobernadores a favor de medidas de confinamiento para preservar la capacidad del sistema público de salud.
De igual manera, reiteró su malestar con el Tribunal Supremo Federal (STF), que otorgó a los gobernadores el poder de decidir sobre medidas de aislamiento social, y repitió el discurso de que «es fácil poner una dictadura en Brasil».
“Tengo la obligación como jefe de estado de tomar decisiones. Tengo las manos atadas por una decisión del Tribunal Supremo Federal que delegó estas medidas a los estados y municipios. Me siguen llegando videos de personas esposadas por estar en la calle. No puede seguir así. Como le dije al ministro, en privado, que no quería que se hiciera público, es fácil colocar una dictadura en Brasil. La gente tiene miedo en casa ”, precisó.
Por su parte, el subsecretario de Vigilancia Sanitaria del Ministerio de Salud, Eduardo Macário, afirmó que la llamada «inmunización de rebaño» no es una estrategia viable sin la vacuna contra el virus.
Además, según datos del Ministerio de Salud, casi la mitad (47,2%) de las pruebas ya realizadas en Brasil provienen de la red privada.
De momento, 871,839 personas han accedido al examen: 460,102 en el Sistema Único de Salud y 411,737 en la red privada, siendo que tienen lugar poco más de cuatro mil pruebas por millón de habitantes.