El equipo de Úbeda aprovechó sus momentos y fue superior a un rival sin reacción, que compromete su clasificación internacional en el 2026.
El fútbol argentino se detuvo este domingo para una nueva edición del Superclásico. Boca recibió a River en La Bombonera, por la fecha 15 del Torneo Clausura 2025, en un duelo clave por la clasificación a la Copa Libertadores.
Tras unos primeros 45 minutos disputados lejos de las áreas y con escasas situaciones de peligro, un pelotazo largo cambió el rumbo del partido: Milton Giménez le ganó de arriba a Paulo Díaz y dejó a Exequiel Zeballos mano a mano con Lautaro Rivero. Tras un primer remate tapado por Armani, el “Changuito” aprovechó el rebote y le dio la ventaja parcial al conjunto Xeneize.
Ya en el complemento, y con el ingreso de Quintero por Rivero, Boca volvió a golpear temprano. Zeballos ganó en velocidad a Martínez Quarta y tiró un pase atrás que, tras una desinteligencia entre Paulo Díaz y Marcos Acuña, Merentiel transformó en el segundo gol para los dirigidos por Claudio Úbeda.
Por el lado de River, los defensores centrales mostraron un nivel muy bajo y los delanteros casi no tuvieron participación. Recién sobre el final, con un Boca algo desconcentrado, el “Millonario” logró generar las chances más claras del encuentro.
Los dirigidos por Marcelo Gallardo están obligados a ganar su próximo partido frente a Vélez y a esperar los resultados de Argentinos Juniors, San Lorenzo y Deportivo Riestra para mantener sus aspiraciones de clasificar a la Copa Libertadores.