El Tribunal Oral Federal N°7 retomó las audiencias virtuales con la presencia de la exmandataria. Se incluyeron los descargos de varios imputados y los aportes de arrepentidos.
Se reanudó el juicio por corrupción conocido como “Cuadernos”, que tiene como principal imputada a la expresidenta Cristina Kirchner, exfuncionarios de su gobierno y empresarios por el pago de coimas.
El proceso que se llevó delante de manera virtual, por el Tribunal Oral Federal N°7 (TOF7), tiene una jornada cargada de testimonios entre los descargos de algunos de los imputados y de los arrepentidos en la causa.
La primera lectura de la jornada, fue la de un documento que abarca a 86 imputados y más de 540 hechos ligados a presuntos pagos ilegales para adjudicar obras públicas entre 2003 y 2015.
Dicha exposición del Ministerio Público avanzó con una lectura detallada de cada tramo. El tribunal prevé terminar la presentación de la acusación el 2 de diciembre y luego abordar otros capítulos vinculados a causas conexas para ordenar el resto del proceso.
Asimismo, el tribunal repasará las pruebas que el fallecido, fiscal federal Carlos Stornelli, tomó como base para formular los cargos contra los acusados. La actual fiscalía busca sostener la hipótesis de una asociación ilícita encabezada por la titular del PJ nacional, mientras que las defensas apuntan a cuestionar la solidez y la procedencia de esos elementos.
La declaración de Ernesto Clarens
El financista, uno de los arrepentidos de la causa, dio detalles que comprometen a Cristina Kirchner. Reveló que se juntaba con el ex secretario presidencial, Daniel Muñoz “para entregarle el dinero tanto en el Hotel Panamericano, donde aquel tenía una habitación, que no siempre era la misma; o en el domicilio de la calle Juncal y Uruguay, del matrimonio Kirchner, en el caso de que fueran sumas más importantes”.
“En esos casos Muñoz me esperaba en el hall de la planta baja del edificio de Juncal, yo nunca subí al departamento…“, aseguró Ernesto Clarens.




















