En su discurso en la Asamblea de Nueva York, el mandatario cuestionó a la organización multilateral y respaldó su alianza estratégica con Estados Unidos.
En el marco de su presentación ante la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) que se desarrolla en Nueva York, el presidente Javier Milei, cuestionó a los estados tradicionales y reclamó a Venezuela que libere al gendarme argentino retenido ilegalmente.
“En esta misma asamblea presenté una nueva orientación en política exterior para la Argentina. Sostuvimos que era imperativo un retorno a las ideas de la libertad, a los principios importantes que sostienen la dignidad de la vida, la libertad, la propiedad de todos los individuos bajo la ley”, inicio el mandatario ante los presentes.
A lo que sumó: “El exitoso modelo de Naciones Unidas que hablaba de la necesidad de paz y victoria y que se fundaba en la cooperación de los estados nación, se vio reemplazado por un modelo de gobierno supranacional de burócratas internacionales que buscan imponerle a los ciudadanos del mundo un modo de vivir determinado”.
“Así es como pasamos de una organización que pretendía mediar la paz entre pares a una organización que pretende decidir no solo qué debe hacer cada nación, sino también cada uno de los individuos en las distintas latitudes del planeta. Nosotros creemos en el fin original de este organismo. Creemos que existen problemas globales que requieren del diálogo y la cooperación internacional para ser resueltos. Pero para eso debemos rechazar estas extralimitaciones que a menudo acompañan a las agendas nobles”.
En su alineamiento con Dolad Trump, el libertario destacó: “Como sostuvimos el año pasado, no acompañaremos nunca al cercenamiento de libertades individuales, comerciales, ni la violación de los derechos naturales de los ciudadanos de los estados miembro. Y durante el último año y medio hemos votado en consecuencia”.
“La situación del ciudadano argentino Nahuel Gallo secuestrado y detenido de manera arbitraria en Venezuela sin imputación, sin asistencia legal ni consular, en palabras simple: una desaparición forzosa”, remarcó Milei que además, hizo un llamado a la comunidad internacional “para que acompañe este reclamo legítimo, en defensa de los principios más básicos del derecho internacional y de la dignidad humana”.